Hacía tiempo que mi compi Mónica Micó, con la que compartí cuatro años geniales en el IES Ataúlfo Argenta, me había comentado que quería darle una vuelta a trabajar por retos. Cuando me trasladé a Bilbao, al CIFP Txurdinaga LHII, y comencé a trabajar con ETHAZI, Mónica me reiteró su interés. Y por fin este curso, desde el IES Augusto González de Linares, el trabajo por retos se va materializando.
Parte del profesorado del centro, concretamente del departamento de informática, ha decidido poner toda la carne en el asador (chuleta, chuletón, churrasco… ¡todo! 🥩) para comenzar a trabajar de manera similar a como lo hacemos nosotros. Por lo visto la Consejería tiene interés en hacerlo posible y desde el CEP también los apoyan.
Ahora que lo veo desde dentro, soy consciente del grandísimo trabajo y apoyo institucional del que disponemos aquí, y que constituye las líneas de actuación de ETHAZI: la difusión de Valores 4.0, las propuestas STEAM, el fomento del pensamiento creativo, la adecuación de los espacios, el sistema de evaluación por competencias… y el enorme esfuerzo que todo el profesorado de mi departamento (no sé del resto) ha puesto para conseguir que todos los cursos de todos los ciclos de informática trabajen por retos desde el minuto uno y haya un ambiente profesional en el que todos vamos a una, prácticamente en piloto automático. Yo llegué, como quien dice, “a mesa puesta”. Y como les comentaba a los compañeros y compañeras del AGL cuando me preguntaban qué pasaba si alguien del equipo docente no quería trabajar por retos… “¡Es que son lentejas!”.
Nota mental: entre la carne del asador, la mesa puesta y las lentejas me está saliendo un post muy gastronómico…😋
Cuando Frutos Feo, compañero de Mónica y zamorano como yo, contactó conmigo para que les diera una pequeña sesión informal en la que les contara cómo trabajamos nosotros, sentí por un momento el síndrome del impostor: “¿Quién soy para hablar de esto -como diría Fito-, si yo acabo de llegar”. Pero decidí que podía aportar mi experiencia desde mi punto de vista personal.
La tarde transcurrió casi sin darnos cuenta. Una hora de charla y casi otra más de preguntas y puesta en común con un grupo de compañeros y compañeras dispuestos a poner todo de su parte para hacerlo posible.
Decían que nosotros teníamos mucho ya avanzado y que les parecía que iban a tener que trabajar muchísimo para llegar a donde estamos nosotros ahora. Y no lo dudo. Pero como les dije:
“Un viaje de mil millas comienza con un primer paso”.
Lao-Tse 🧘🏽
Bueno, venga, yo dije algo así como “Todos los caminos empiezan por un paso”. Pero se me entendió igual.
El paso ya lo han dado, ahora solo falta llegar al final 😊
Dejo aquí la presentación de la sesión, por si puede servir: